Bancales con un buen acolchado natural


Para este verano, la prioridad es la construcción, pero no queremos prescindir de tener un pequeño bancal, que no nos de mucho trabajo pero que nos abastezca de ciertos productos básicos. 

Puesto que nuestra tierra está bastante deteriorada, por un cultivo intensivo de cereal durante muchos años, esta idea de bancales pequeños con gran aporte ógánico, nos ha parecido excelente y probaremos a llevarla a cabo en cuanto recolecten la cebada que en estos momentos ocupa la finca.

No estamos preparadas para generar la huerta de verano. El terreno está sembrado de cebada que recogerán, aproximadamente en un mes, y para entonces nuestro objetivo principal será la construcción de la casa que, si la burocracia nos deja, esperamos comenzar a finales de junio. 

En la primera fotografía se deja ver uno de estos bancales generados en alto, normalmente si se tiene un terreno muy apelmazado, nosotras dejamos aquí la idea, pero lo haremos enterrado. 
Para el aporte orgánico aprovecharemos la madera vieja que hay en las ruinas de la antigua casa de los abuelos de Esther y paja de la siega de la cebada.



PASOS A SEGUIR:

1. Podemos barajar dos opciones: sacar unos 15 cm de profundidad de tierra en el terreno o colocar los troncos directamente sobre el suelo sin hacer hueco. Si el suelo que tienes debajo esta vivo, es preferible sacarlo para cubrir los troncos, si no, podemos ahorrarnos ese trabajo

2. Guardar la tierra que has sacado de esos 15 cm,  para colocarla encima de los bancales después.

3. Reunir la materia orgánica. La madera, cuanto más vieja y húmeda mejor ya que favorecerá su descomposición. La madera en descomposición proporcionará alimento a las plantas.

4. Cubrir los troncos con tierra y acolchado de paja para retener la humedad. 
La madera retendrá la humedad en los picos más altos de sol.


5. Mezclar la paja y la tierra con un rastrillo. Así evitaremos que se vuele con el viento. 

6. Si tienes gallinas, deja que picoteen en los bancales. Así removerán la tierra por ti y la abonarán con sus deposiciones. Si no, composta tu basura orgánica y añádela.

A ver qué tal nos saben esos gazpachos vitaminantes y mineralizantes con nuestra primera materia prima de casa.