Hello world (so it goes)

Los ritmos de la vida y los de la electricidad no necesariamente coinciden.

Hace dos días, Luc festejó los diez años de Resacas con un relanzamiento. Algo (muy breve) dije al respecto en La Red Social, pero no lo dije aquí (navegamos a la vez dos mares de aguas diferentes; será cuestión de probar nuestra marinería). Fueron dos días en que habité el mundo real y, la verdad, es que escribir en un blog, componer un post, requiere un tiempo y una dedicación que La Red Social, toda ella tan práctica, tan automática, tan frictionless, no requiere.

Pero como es casi una cuestión de principios, vengo a enmendar ahora.

Resacas vive porque Luc así lo desea. Viva Resacas.

(Como dice Javier, es cuestión de enriquecer la web. Exagerando un poco -pero, para ser honesto, no creo que mucho- enlazar de la manera que dice Javier es hoy casi una declaración política.)

Enlaces, señores, enlaces. Una economía del don y una ética de la lectura (leer con dedicación, en perjuicio del meme).

No tenemos que olvidar tampoco una idea del viejo McLuhan: toda tecnología convierte a la tecnología que la precedió en una forma de arte.

Salud, blogueros.