EA Cuenca, colectivo de economía social con moneda complementaria



Qué es y como vio la luz el colectivo de economía alternativa con moneda social EA Cuenca.


Después del taller sobre economía solidaria que se dio lugar en la Semana de la economía en el 15M conquense, se generó un grupo inicial de gente interesada en darle forma a un colectivo intercambio en Cuenca.




En un principio pensamos en un banco del tiempo, pero por un lado sabíamos que en Cuenca ya hubo un intento de banco de tiempo que terminó por desaparecer y por otro lado, el sistema de tiempo nos limitaba un poco, puesto que si el intercambio se hace en horas de trabajo, dejábamos fuera a todo el que ofreciese productos o alquileres a la comunidad. Por ejemplo, cuantos tomates equivalen a una hora de masajes. Por eso pensamos que era mejor cambiar el intercambio de "horas", por una moneda social que albergase cualquier tipo de transacción (servicios, alquileres y productos). Tipos de intercambios

Con esa idea empezamos a trabajar, documentándonos y preguntando a otros grupos que trabajasen con moneda social y EA Cuenca (Economía Alternativa Cuenca) y el Copón, como moneda social conquense, fueron tomando forma.


Mercadillo del Copón, donde todos los productos se venden
moneda social
Rafa, nuestro informático - un tío rico en copones porque ha trabajado como un campeón - modificó para ajustarse al enfoque de EA Cuenca, la aplicación informática LETS (software libre) Un programa ideado para bancos de tiempo en el País Vasco, pero que con sus retoques ha quedado como banco digital de todas las transacciones de nuestro colectivo. Pincha aquí para acceder a nuestra base de datos de transacciones, desde la cual te puedes dar de alta como usuario de la red de intercambio. Nadie que no sea un usuario registrado de la red puede ver los contenidos privados, pero una vez que te has dado de alta, el sistema es un banco completamente transparente que te deja ver todas las transacciones realizadas durante este año de vida de EA Cuenca.
Rafa, nuestro informático, lidiando con la prensa local

Nos queda mucho recorrido por hacer, pero este tipo de economías locales, son una gran alternativa a la crisis económica que estamos viviendo, haciéndonos ver que la mayor riqueza de una comunidad son las capacidades de sus componentes y no el dinero del que se dispone, como nos han hecho creer durante mucho tiempo.


 Listado de ofertas de la red de economía alternativa


Primer Libro







Estado: mucho estudio pero feliz! | Escuchando: Manda una Señal (Maná) | Leyendo: Armonía Rota (Barbara Wood)

Siempre he estado rodeada por libros, los busco y ellos a mí.
Primero en mi casa.
Luego en el PC.
Es increíble que el primer libro que compré fue un Harry Potter y la Piedra Filosofal que vi a la venta en la ventana de una casa, hace unas semanas... importante hecho, dado que fue el libro que me hizo la come páginas que soy (a mucha honra).

Pero hoy ha sido especial. He comprando un libro nuevo, el cual pude desenvolver y oler. Mío, mío, sólo mío. Nuevo. Virgen. Me sentí en las nubes,... justo ahora lo veo en mi escritorio y me alegro nuevamente.

No puedo esperar a terminarlo y comprar otro.

Erliann.

Una señal

He conocido personas muy vulnerables, aquellas que viven con el dolor sobre los hombros, con heridas en sus frágiles almas. Personas que un día abrieron sus ojos a sus propios mundos, y están demasiado perdidos para notar el paso del tiempo o cualquier cosa que está mas allá de todo eso. He conocido personas que ponen incómoda a la gente, personas que sonríen y viven por cosas que son secretos que ellas y sólo ellas conocen. He conocido a estas personas, les he hablado, las he tocado y las he acompañado por sus viajes. Y agradezco que, aún sin conocerme, con el temor de no saber si las dañaría o no, me hayan dejado estar con ellas, cantar, bailar, jugar y reírme.

La semana pasada estuve con pacientes psiquiátricos... no fue la primera vez, sino la segunda, pero esta fue la vez en que un cambio se generó en mí. Esas personas, cada una con un problema distinto, con un mundo distinto y secreto al que aferrarse, fueron parte de mi vida. Hay algo que no puedo explicar, creo que es emoción, y siemplemente eso. Emoción porque entré vacía de alma y llena de conocimientos, y salí llena de conocimientos sobre el alma. Y con una canción que siempre me recordará a la mujer más jovial que he conocido.



Ellos quedan allí y yo avanzo, ahora a un nuevo lugar, con nuevas perspectivas y nuevos desafíos. Espero que sea interesante.

Erliann.

Día de los muertos

Ya sé, me van a decir que exagero, que manipulo los hechos, que enmiendo, corrijo, que busco el efecto. Pero les juro (por Todos los Santos, pulgar e índice en cruz sobre los labios) que lo que les voy a contar corresponde a la verdad, que hoy, a las siete y media de la mañana, el remisero que me llevaba a la parada del micro, sin que viniera a cuento de nada, porque sí, por mera necesidad de desahogo, me dijo que estaba mal por su padre, por lo que había pasado con su padre, que se había ido a Mar del Plata, que se había metido en el mar. Que no había vuelto a salir. Que sufría acúfenos, esa enfermedad del ruido permanente en los oídos, que tenía 82 años y que estaba harto, que no lo soportó más. Se fue a Mar del Plata y se metió en el mar. Y no salió.

Y es así como se los cuento, les juro (por Todos los Santos, pulgar e índice en cruz sobre los labios), que por si no bastara ese asomarse de la Parca, recién, hace un rato nomás, el taxista que me traía de vuelta a casa, a cuento de nada, por mera necesidad de desahogo, me contó de su mujer, del accidente cerebrovascular a miles de kilómetros, de que tuvo que traerla, con una pierna paralizada, de los 7000 pesos que le cobraron, que la plata no importa. Que la operaron, que ella no quería que la operaran, que no quería que él firmara la autorización. Que la operaron igual, que si no la operaban se moría, o quedaba en silla de ruedas. Que después de la operación él la vió bien, dormida, pero bien, respiraba, y que al otro día todavía dormía, y al otro y al otro y que le dijeron que era por los sedantes, para ayudar al cuerpo a recuperarse y que se murió al día siguiente. Que la hizo cremar. Que le compró una cajita y que ahora está con su madre, que ahora descansa en paz. Que ya pasaron unos días pero todavía no abrió el ropero. Que lo va a hacer uno de estos días, con su hija.

Es así, les juro, como les cuento. Una de esas cosas que se cuentan creyendo que así uno se libera de ellas.



A la memoria de mis muertos queridos.

Sozinho - Solo

Como anillo al dedo.
Cuando la escuché el viernes gentileza de Mariela no supe qué decía.
Hoy busqué los subtítulos y resulta que se parece  a mi diario vivir últimamente.
Sozinho. Caetano Veloso.


A veces, en el silencio de la noche
Me quedo imaginándonos a los dos
Me quedo allí soñando despierto, juntando
El antes, el ahora y el después.
¿Por qué me dejas tan libre?
¿Por qué no me sigues los pasos?
Me estoy sintiendo muy solo.

No soy ni quiero ser tu dueño
Es que un cariño a veces cae bien
Tengo mis deseos y planes secretos
Que abro para tí y nadie más.
¿Por qué me olvidas y desapareces?
¿Y si me interesara por alguien?
¿Y si ella, de repente, me gana?

Cuando nos gustamos
Es claro que nos cuidamos
Dices que me amas
Sólo que es de la boca para afuera
O me engañas
O no estás madura
¿Dónde estás ahora?

Una de facinerosos

Araujo, querido, qué semana del orto. Este laburo de mierda, qué te voy a contar. El lunes me agarró una contractura de esas que te matan. La cuestión es que tenía un mareo que no podía ni pensar. Peor que borracho, todo el tiempo. No se puede laburar así, podés hacer cualquier cagada, viste. Ya me pasó una vez. No me podía ni parar. Dicen que son las preocupaciones. Esta vez, no perdí tiempo y me empastillé de una, y ayer fui ver al Tordo.

Resulta que tengo el cuello rígido y un principio de artrosis. Qué mierda. Artrosis es enfermedad de viejo. ¿Estoy viejo, Araujo?

La cuestión es que no pude ir a hacer ese laburito que te dije, viste. Yo creo que el Roto me va a salir a buscar a mí. Decí que tuve tiempo de avisarle a Karpasczy. El polaco ese es bueno, no se le escapa ni un cliente, pero siempre deja todo muy enchastrado, llama mucho la atención y después el Roto se tiene que andar bancando los titulares "Triple crimen en Pereyra: ¿mensaje mafioso?". Si dan ganas de mandar un anónimo y decir "si, boludo, qué te pensás que es, ¿un libro de versos?".

Pero claro, al Roto no le hace gracia el chiste. Es muy serio. Le gusta más como laburo yo. Dice que lo mío es más "quirúrgico". Le gustan esas palabras, al Roto. Pero imaginate, con el mareo que tenía la semana pasada a ver si me queda alguno boqueando o me la pegan a mí, qué se yo. Yo no podía. Y Karpasczy aceptó un cincuenta; después de todo, era laburo mío. Un cincuenta está bien, ¿no? ¿Vos decís que me zarpé? No creo, un cincuenta está bien. Creo. Por ahí un sesenta. Ya está, el laburo está hecho y ahora el Roto me busca.

Me dijo Artiola que está caliente. Que dice que no puedo borrarme sin avisarle. Que Karpasczy es medio bocón y la puede cagar con cualquier pelandrún que hace policiales para Diario Popular. Por mandarse la parte, nomás.

Qué merda. Me vuelve el mareo. No puedo pensar, Araujo. Yo no creo que Karpasczy sea tan boludo. En este laburo no durás 7 años, como él, si sos tan boludo. Siete años amasijando giles. No, boludo no podés ser.

El Tordo me dijo que siga con las pastillas. De la artrosis no me dijo nada. ¿Se puede seguir en este laburo con artrosis? Yo no sabría qué hacer y no me da para jubilarme. Si yo me siento un pendejo. Preguntale a la jermu de Rodríguez, si estoy tan viejo, je. Rodríguez se tiene que cuidar. La mina anda boconeando boludeces. Que se queda con vueltos. Yo creo que el Roto se la tiene jurada. Lo anda dejando arrimarse mucho, lo trata de amigo. Si el Roto te trata de amigo, tenés que desconfiar. Miralo al Tano Petruzzi. Que parecía que el jefe era él. Y todavía buscan pedacitos en Parque Pereyra.

Ese laburo lo hice yo. Me dio pena, el Tano. Habíamos tenido varios encargos juntos y nos cagamos de risa, como cuando se nos desparramaron las tripas de un buchón por el camino de Boca Cerrada. Lo llevábamos para Ensenada y se nos abrió la caja de la chata. También, a quién se le ocurre llevar un fiambre en una chata. Estábamos bastante del orto. Para relajar después del laburo, viste. Pero qué problema nos íbamos a hacer, si por esa zona no pasa nada, es tranqui. Viste cómo es Boca Cerrada. El pozo más chico entra un chabón parado. Nos comimos un pozo y se desenganchó la puerta. El fiambre rodó al asfalto. Menos mal que nos avivamos. Lo habíamos tenido que coser a puntazos y con la caída se le fueron las tripas por los agujeros. Rodó como cincuenta metros y dejó el desparramo. Nos bajamos con el Tano y juntamos lo que pudimos. Después de todo, la idea era que hiciera de carnada de los dorados. Y el Roto que dice que lo mío es quirúrgico. Quedaron restos de tripa, igual, y pensamos que los caranchos se iban a ocupar. Pero algún pescador lo tiene que haber notado, porque me dijeron que salió en El Día de La Plata un suelto sobre la ineficacia de los transportes de los mataderos. Como si los mataderos no estuvieran por el lado de Gorina, bien en la otra punta. Menos mal que no salió lo del mensaje mafioso.

Pero bueno, lo tuve que amasijar al Tano. El jefe se la tenía jurada, por agrandado y bocón. Le dimos el Bola y yo. Lo agarramos saliendo de la casa y lo metimos en el auto. Como era de los nuestros, lo fusilamos en Parque Pereyra. El Bola lo descuartizó; medio que le gustan esas cosas, mucho morbo. A mí el Bola no me da confianza. Estuvimos como hasta las cuatro de la mañana dando vueltas por Pereyra, a oscuras, sin luces, sembrando pedazos por acá y por allá. Al primo del Tano, que es tira y manejaba con él los camellos de Altos de San Lorenzo, le mandamos el dedo con la alianza en un ataúd chiquito. La idea fue del Roto. Lo había leído en algún lado. Al Roto le gustan esas cosas.

Por eso te digo, que Rodríguez se cuide. Y por eso te digo que Karpasczy no puede ser tan boludo.

Pero no hay que abusar. Mañana le salgo al cruce y lo voy a ir a ver al Roto, explicarle y ver si garpa. A ver si encima me tengo que arreglar con Karpasczy. Pero todavía estoy mareado.

Qué poronga. Me tocan las pastillas de mierda.

Cuidate, Araujo, aunque yo sé que a vos difícil que te hagan cantar ninguna.